⭐⭐⭐⭐✨RESENAS
⭐⭐⭐⭐✨RESENAS
En el mundo del aparejo, los pequeños detalles marcan la diferencia.
Dos operaciones simples se repiten a bordo: cortar una driza limpiamente y sustituir un cabo con un pasador mensajero.
Bien realizadas, garantizan la seguridad, la fiabilidad y la longevidad de sus maniobras.
1. Cortar una driza limpiamente
Un cabo mal cortado se deshilacha rápidamente. Esto debilita la funda y dificulta el trabajo de cabuyería.
👉 Para evitarlo:
Utilice una herramienta adecuada (cuchillo caliente o soldador textil) para cortar netamente funda y alma.
Realice un acabado limpio (costura, pasador mensajero) para proteger el extremo.
Resultado: un cabo más duradero, más seguro y listo para recibir una gaza/empalme.
2. Usar un pasador mensajero
Al cambiar una driza o una relinga de rizos, el riesgo es siempre el mismo: que el cabo desaparezca dentro del mástil o de la botavara, sobre todo en el mar.
El pasador mensajero es la solución: un pequeño lazo textil con funda, resistente y ligero, que se fija a la driza antigua para pasar la nueva.
👉 Ventajas:
Sin nudos que se bloqueen en las poleas.
Sin pérdida del cabo dentro del mástil o de la botavara.
Sustitución rápida y limpia.
Por qué estos dos gestos son importantes
Prolongan la vida útil de sus cabos.
Refuerzan la seguridad de sus maniobras.
Ahorran un tiempo precioso a bordo.
Para recordar
Una driza bien cortada = cabo listo para durar y rendir.
Un pasador mensajero = sustitución fácil, sin riesgo de pérdida.
Para sus drizas, escotas y accesorios textiles adaptados a cada uso, descubra nuestra selección:
👉 gorillaropes.com